¿QUÉ VIERON EN TU CASA?

Por. Lic teol/inf. Roberto Romero

En los registros históricos  divinos de los reyes que nos dejó el antiguo testamento, encontramos un incidente en la vida del rey Ezequías, que nos debiera hacer pensar.  En el Capítulo 20  de 2 Reyes  se nos dice que el rey estaba grandemente enfermo. La infección causada por una terrible llaga  se había propagado a su organismo poniendo en peligro su vida.

 En ese momento crítico Dios le envió el siguiente mensaje por medio del profeta Isaías: “dispón de tu casa, por que ha de morir, y no vivirás “este solemne mensaje quebranto a Ezequías.  El rey busco a Dios en oración, lloro amargamente y le rogo que le devolviera la salud Dios le envió otro mensaje con Isaías: “yo he oído tu oración y visto tus lagrimas: he aquí yo te sano…y añadiré a tus días 15 años”.

 Esta experiencia acerco al rey a Dios, haciéndole sentir su cuidado paternal. El rey era tan feliz que no podía creer lo que le estaba sucediendo.  Su fe no estaba a la altura de las circunstancias. Y pidió una señal. Isaías le dijo que escogiera una de las dos señales: Que avance la sombra 10 grados o que retroceda 10 grados.

Ezequías replicó: “Fácil cosa es que la sombra decline 10 gados;  pero, que la sombra vuelva atrás 10 grados”. “Eso sí sería un peligro esa es la clase de señal que quiero”. Dios le concedió la señal y la sombra retrocedió 10 grados. Ezequías recobro la salud. Este suceso extraordinario no tiene explicación científica.

Todo lo que se puede decir humana mente es que la tierra dejo de girar sobre su eje y  después comenzó a girar en sentido contrario durante unos 40 minutos esto quedo registrados en todos los relojes del sol y causo un revuelo, especial entre los astrónomos babilonios que habían oído que se trataba de una señal de que Dios sanaría a Ezequías.

El rey de babilonia envió  embajadores para que averiguaran lo que pudieran acerca de este  Dios obrador de tales milagros y facilitara al rey de Judá por su curación.  Esta fue la oportunidad de oro de Ezequías. Pudo haber testificado del amor y poder de Dios y del gozo que sentía en servirle.  Pero  en vez de hablarle de lo que Dios había hecho por él, llevo a los embajadores por toda la casa y le mostro todo sus tesoros. “ninguna cosa quedo que Ezequías no les mostrase, así  en su casa como en todo su señorío”.

No dijo ninguna palabra del poder de Dios del cielo ni menciono porque  amaba a su bendito señor al irse los embajadores Isaías volvió y le pregunto al rey: “¿Qué vieron en tu casa?  ”Ezequías fracaso.

No  aprovecho la oportunidad singular que Dios le había dado para testificar de él antes los enviados extranjeros. Dios lo había sanado de una enfermedad mortal.  El milagro del retroceso de la sombra había despertado intereses general. Qué oportunidad de testificar del gran poder de Dios para salvar a los hombre del pecado y permitir que los embajadores vuelvan a su país con el conocimiento de la gracia salvadora del señor. Pero Ezequías había fracasado totalmente.

Podría hacernos la misma pregunta hoy a nosotros - a ustedes. Y a mí.  ¿Que ven en nuestros hogares, que es lo que a gente ve en nuestras escuelas, hospitales? ¿Qué ven en nuestras  iglesias, oficinas? ¿Que ven en nuestras vidas? Ven solamente  “cosas” o vidas transformadas por el poder de Dios.

Editor: Teólogo-Informático Roberto Romero Prensa Digital Notic Voz el Cajigalense; Yaguaraparo, Municipio Cajigal, Estado Sucre, Venezuela. Dirección Internet: http://robertoromeropereira.blogspot.com/