VENTANA
PANORÁMICA…
JOSE ISIDRO
CORDERO
Extraordinaria jornada
cumplimos durante los últimos cuatro días de la semana pasada, en Caracas,
conociendo, analizando y aportando ideas en busca de solución a dos problemas
que están hoy en día penetrando en lo más profundo del organismo social venezolano:
la intolerancia política y la violencia. Ambos problemas, en sus exageradas
expresiones, tiende a ser evidentes testimonios de atentado contra los derechos
humanos.
La jornada cumplida estuvo dividida en dos etapas: la primera,
referida a la intolerancia política, la cumplimos con la asistencia a la
conferencia auspiciada por el Ifedec: Centro de Políticas Públicas, en el marco
de sus 50 años de fundado, y cuyo expositor principal fue el doctor Andrés
Pastrana, expresidente de Colombia, quien hizo un relato muy preciso sobre las
condiciones de agitación política
operantes en Colombia para el momento de ejercer el cargo de Presidente, y del
programa que puso en marcha en función de un entendimiento que llevara al logro
de la paz; uno de los puntos de ese programa, tal vez el más criticado por los
sectores políticos de su país, fue la admisión –que con anterioridad había sido
aprobada mediante consulta popular- de una zona de distensión que le abonó a
los integrantes de la Farc una franja territorial donde moverse , sin ser
molestados, de 42.000 kilómetros cuadrados; que como el mismo expositor dijo:
“Para Europa pude ser la extensión territorial de un país, por ejemplo, de
Suiza, pero para Colombia representaba el 0,003% de territorio en la región
selvática de El Caguan”. El doctor Pastrana concluyó su brillante y pedagógica
exposición confesando que él no ha tenido un día de paz en Colombia, y
afirmando que no es posible un proceso de búsqueda de paz sin establecer claras
condiciones de diálogo, lo que significa admitirse como instancias con
determinados caudales de verdades.
La otra mitad de la
jornada –la más intensa- cumplida entre
los espacios de la Conferencia Episcopal Venezolana y la Universidad Católica
(UCAB), configurada como “III Encuentro Internacional de Constructores de Paz y
la VIII Jornadas de Reflexión Social de la Iglesia”, consistió en una serie de
exposiciones, foros (8 foros temáticos
como herramientas para erradicar la
violencia) y discusiones grupales de altísima consistencia didáctica y
cognitiva. Esta parte de la jornada –ambas partes no articuladas como expresión
organizativa- estuvo dirigida por el
Centro Gumilla, bajo el lema: “Hablando se entiende la gente”.
En esta parte de
la jornada sobresalieron exposiciones de algunas experiencias llevadas a cabo
en otros países latinoamericanos (México y Ecuador), referidas al tema de la
violencia institucional, que, en gran medida, atentan contra los Derechos
Humanos, y de carácter social, que vulneran la calidad de vida poniendo en zozobra
a las familias y corroyendo hondamente el entramado social. Por la parte de la
experiencia venezolana, se conoció de lo que ha sido la violencia en los
centros penitenciarios, que es como una síntesis de lo que ocurre en nuestras
calles. De esa manera, sigue reflotando el criterio, bien sustentado, de que la
violencia se universaliza en la sociedad venezolana, por tanto constituye un
problema común a toda la sociedad, cuya solución debe buscarse en conjunto. En
ese trabajo dirigido a derrotar o arrinconar a la violencia, una de las
recomendaciones básicas, surgida de la insuperable exposición de la doctora
Naibet Soto Parra (Venezuela), es
apoyarnos en el tejido de la red, como herramienta para el activismo, la
denuncia y el compartir de experiencias.
BRISAS SUAVES
UN DATO
CURIOSO.
Según sondeos de opinión, cuya comparación de resultados fueron presentados en
el foro temático: “Derechos Humanos”, el gran problema que los venezolanos
sienten no es la inseguridad, sino la falta de empleo, que en términos
generales acuso un índice de 40%. Sin embargo, uno capta que la inseguridad
como que tiene más vía libre…
CARACAS,
CARACAS,
como me gusta esa ciudad, así diría el vallenatero colombiano. Por lo que pude
medio sondear, en rincones distintos a la jornada ya mencionada, los caraqueños
están apostando fuerte al proceso comicial para salir del embrollo político en
que estamos agarrados. Pero sostienen la idea de que el Presidente Chávez no se
inscribirá como candidato y que su carta a jugar será Elías Jaua. Ese
planteamiento, en mi humilde apreciación, explica un poco el que Diosdado
Cabello se haya desplegado en activa movilización por todo el país, poniendo un
paso adelante, pegando afiches y dejando ver sus aspiraciones. Como que vienen vientos borrascosos dentro
del PSUV. ¿Y qué tal si Chávez decide así, y Diosdado decide de otra manera:
lanzar su candidatura? Simplemente, el
PSUV tendría dos candidaturas, para un mismo propósito, en la calle. Un ciclón
al estilo de los que se desatan en el Atlántico…
AUN CUANDO
FALTA
mucha más participación ciudadana en la búsqueda de solución a sus problemas,
uno de ellos: lograr el respeto a los Derechos Humanos, las estadísticas dicen
que las instituciones en defensa de los Derechos Humanos han aumentado en
Venezuela, hasta el punto e cubrir casi todo el territorio nacional. Ese
aumento es un éxito para los constructores de paz…
SE CONCRETA
EL HECHO
de que uno de los Derechos Humanos más vulnerados en nuestro país, es el
derecho a la vida; precisamente el derecho máximo y fundamental de todo ser
humano…
EL ENTENDER QUE hay un
nosotros, es elemento primordial para consolidar trabajos en procura de la paz.
En una oportunidad dijo Albert Einstein: “El verdadero valor de un hombre se
determina examinando en qué medida y en qué sentido ha logrado liberarse del
yo”… USTED VOLVERA a leerme.
